Mi voz
Fue una pregunta de un directivo de televisión: “¿Te atreves a presentar el informativo del mediodía?”.
“Das muy bien a cámara y tu voz es clara y convincente. Transmites”. Su confianza en mí me lanzó a ponerme en primera línea, hasta el momento había estado detrás de la cámara, siendo reportera de calle.
Ahora tenía una dificultad más: el piloto rojo del directo. Cuando se enciende, ya no hay marcha atrás. Solo queda hacer una respiración profunda, tragar los nervios con agua, una gran sonrisa y adelante.
Tras perder el miedo al plató y al silencio que contiene, descubrí que es una gran escuela: aprendí a desconectar de los focos y a disfrutar de la fuerza de un relato en directo. A entrevistar mirando a los ojos y a escuchar sin consultar el papel.
Me convertí en la presentadora de informativos de TVE Extremadura y unos años después, tuve la suerte de incorporarme al equipo que puso en marcha la televisión autonómica de mi tierra: Aragón TV.
Me encargaron la primera retransmisión en directo de la cadena: la gala anual del Real Zaragoza, y conduje los primeros informativos que se emitieron. Todo un lujo para una aragonesa.
Dicen los que me escuchan que mi voz “llega con lo que cuento, con una mezcla de fuerza y de dulzura”. Agradezco esas palabras, porque pongo todo mi empeño en que así sea. He vuelto a la televisión y a la radio porque son mi vocación: el lugar que elijo para desarrollar mi creatividad, tanto en la búsqueda de nuevos contenidos como en la forma de contarlo.
Fortalezas:
– Mi creatividad y mi curiosidad innatas me llevan a proponer temas propios y a buscar otros enfoques.
– Empatizo con el entrevistado porque doy confianza y le miro a los ojos.
– Tengo una voz clara, directa y convincente que hace que mi relato llegue al que me escucha.






